En el marco del proyecto “Global Sewage Project” se evaluarán las aguas residuales de Piura. Se estudia si los microorganismos patógenos han mutado o si hay otros que pueden causar enfermedades infecciosas a nivel mundial.
Por Elena Belletich Ruiz. 09 junio, 2017.El Laboratorio de Ingeniería Sanitaria (LIS) de la Universidad de Piura participa en el “Global Sewage Project” de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de las Naciones Unidas, que se realiza con la Universidad Técnica de Dinamarca. El objetivo es evaluar, mediante pruebas de ADN, si los microorganismos patógenos existentes han mutado o si se detecta alguno nuevo que pueda ocasionar enfermedades infecciosas que afecten a la población mundial.
Como se sabe, el LIS es un laboratorio acreditado según la norma internacional ISO/IEC 17025. Esta acreditación contempla los análisis físicoquímicos, microbiológicos y muestreo, que han logrado el reconocimiento nacional e internacional.
El proyecto consiste en tomar muestras de las aguas residuales de las principales ciudades de los 150 países participantes. Por el Perú, solo se harán estos estudios en Piura, a través del Laboratorio de Ingeniería Sanitaria del Instituto de Hidráulica, Hidrología e Ingeniería Sanitaria de la UDEP.
A las muestras, recogidas globalmente, del sistema de alcantarillado antes de ingresar a las plantas de tratamiento, se les hará un análisis meta-genómico de prevalencia puntual. Este permitirá determinar los ácidos nucleicos de los microrganismos.
Este proyecto, explica el Ing. Jorge Echevarría, director técnico del Laboratorio de Ingeniería Sanitaria, servirá como una prueba de concepto con la que se podría “iniciar una vigilancia de las enfermedades infecciosas humanas, incluida la resistencia a los antimicrobianos de las aguas de las principales ciudades del mundo para detectar, controlar, prevenir y predecir las enfermedades infecciosas humanas”.
Agregó que la vigilancia de microorganismos patógenos y el estudio de su resistencia a los antimicrobianos son esenciales en las estrategias de control y prevención de enfermedades infecciosas.
Señaló que las poblaciones humanas y de animales se incrementan cada vez más, y con ello, llegan “nuevas enfermedades infecciosas, infecciones emergentes o reemergentes, zoonoticas y enfermedades transmisibles, incluyendo aquellas que son resistentes a múltiples fármacos. De allí la necesidad de realizar estudios permanentes y acciones de vigilancia”.
Muchos de estos eventos, dijo, “pueden atribuirse a la globalización, la urbanización, el cambio climático, crecimiento de la población y la agricultura intensiva. Según la OMS, el 25% de los 58 millones de muertes anuales, que hay en el mundo, son el resultado directo de las enfermedades infecciosas”.